Pobre corazón

que ha sido

almohadilla de alfileres

colgado en las paredes

despreciado sin motivos

condenado al olvido

menos preciado por sus sueños

burlado en sus empeños

salado en sus heridas

rasgado y hecho trizas

servido de juguete

lanzado a un retrete

pisoteado por descuido

remendado y descocido

arrastrado en el camino

por su loco desatino

subastado sin valor

preso del temor

motivo de traición

abandonado en el rincón

ofrecido por las calles

incomprendido en sus detalles

atrapado en telarañas

desterrado a las montañas

sobreviviente a los horrores

de la vida y los amores

pobre corazón

que ha sido

desquebrajado en mil fragmentos

para ser un monumento

a la belleza y el dolor

de una pequeña flor...