Mi madre aventaba ceniza para alejar la neblina de la mañana;

quiero aventar con versos a quien me daña en el alma;

son más limpios, no se pegan en el pelo, no se ensucia la ropa;

quiero aventar con versos el dolor que llevo en el pecho.

Nadie está libre de hacer daño, yo también lo he causado sin intención,

pero vale lo mismo ¡ porque duele lo mismo ! eso es sólo una excusa,

y como la vida cobra aquí, y ahora, me lo está cobrando a mí,

y a cara lavada lo enfrento para estar limpia por si me fuera esta noche.

Al maldito dolor lo haré salir de su madriguera ¡ a fuerza !

y aunque no quiera, con lo mismo que limpio las fecas de mis perros,

porque quiero volver a ser linda, porque no quiero estarlo viendo,

me inhibe, me provoca, me envalentona, y no quiero pasarme del límite.

Por algo he nacido en esta tierra hermosa que he de dejar algún día;

por algo corre por mis venas sangre de araucano, aunque no lo digan mis apellidos;

aquí están mis rasgos, y la pena contenida que mañana lanzo al río,

tempranito, no quiero más, manchar con agravios mi corazón.

Si me dicen que no, yo digo , sí,

soy india de corazón y garra, ninguna pena me lacera;

podría ser por un ratito, unas horas, unos días, unas lunas,

pero nunca ¡ pero nunca ! ...toda la vida...

¡ nunca !

Margarita

27/12/07