Hace muchos años definieron esta fecha

Un concilio romano de ancianos

Que, teniendo una brasa caliente entre sus manos,

Mezclaron las creencias entre cristianos y paganos

Aprovecharon la ignorancia de la gente

Y echaron mano del abuso de poder

Pues aquél de alma sensible que se oponía

Era usado de payaso y lo echaban a los leones de comer

Hicieron pues un evangelio de coctel

Con bultos y tradiciones adorando ídolos a granel

Inventaron historias como ?El niño del tambor?

Manoseando los corazones que lo que necesitaban era un verdadero Amor

Si Jesús hubiera considerado necesario

Adorar el día de su nacimiento

Bien claro hubiese dejado

La fecha y el lugar del acontecimiento

Su mensaje sólo fueron Verdades y Amor

Nada de fiestas, bulla y licor

Sólo dejó bien claro que en la humildad

Está el secreto de la verdadera felicidad

No es increíble que los mismos que le odiaron

Luego hayan aparentado un arrepentimiento

Pues más daño han hecho a todos los que engañaron

Con sus falsos sermones y dis que conocimiento

Bien descritos están todos ellos en La Biblia

Vale decir la que han manoseado a diestra y siniestra

Pero, aún con todas esas letras muertas llenas de mentiras,

La Palabra se mantiene para los que leen sin doctrina

Hay que ser muy cruel para engañar a sus propios hijos

Diciéndoles mentiras viéndolos a los ojos

De que un ?santo? les traerá juguetes

Sería igual decirles que los padres son Jepetos y los niños... son Pinochos

Sé que ellos también fueron victimas del mismo engaño

Pues es una cadena desde el mentado concilio romano

Es mejor darles los juguetes con amor de padre

Y ellos aprenderán a amarlo y respetarle

Celebrar el nacimiento es como celebrar su muerte

O llevar el arma homicida colgando en el pecho

En lugar de llevar el alma limpia

Que es donde Él realmente habita... ¡vivo y poderoso!