Vivo por ti, por tus recuerdos dulces, por tus noches encantadoras, por tus frases de ensueño, vivo por ti, por tratar de merecer tus besos y caricias aunque más no las tenga; te tengo en mis recuerdos, en mis sollozos y en mis sábanas, si, esas sábanas que besabas cuando las confundias con mi cuerpo, se estremecen al saber que tus labios se perdieron en otros besos, otros besos que olvide, pero los tuyos aún los siento, es que ha sido ingrata la suerte conmigo, tenerte pude y retenerte ya es olvido, es que la suerte es solo para los mediocres, y dime es que acaso mi mediocridad te dejo partir, y si es así, ven y culmina lo que empezaste que ya no aguanto más reclamos de mis sábanas y quemalas o tiralas que este amor me mata.