Aun no se han agotado los pasajes?

Una mariposa fragante me llevo a volar lejos,

brindando y blindando dos vidas en complemento,

entre permanecencia escondida y ramas azules;

adormecido sobre versos tristes y alma silente?

Presiento, el cuidado de no clavarse?

con nuestras mismas espadas y trampas en el camino:

me enseñaste a pronunciar la palabra ¡cielo!? azul voz,

tus cabellos ahora flotan, en mi otoño de gotas sumisas,

y este soneto de amor.

Un parapente en vuelo rasante, imaginario real? ¡me lleva a ti!

un viaje secreto sin pasajes de vuelta, lleno de encanto;

¡entonces el llanto!?no fue en vano y tus regaños ¡vida!

ayúdame a empujar este carro, al celeste firmamento?

Siémbrame de tus paisajes de infinito colorido naranja?

en el sentimiento espontáneo, libre?que tiene tu olor suave,

que tiene tu esencia, que magnífica tu presencia,

caminemos suavemente en aquellas orillas blancas de mar?

arenas suaves y ardiente verano siempre, como tu piel ?

la canción de mis besos, los tuyos, mis manos,

tu belleza y fascinación.

Ramiro Deladanza