Mujer de ojos dulces y de la sonrisa blanca,

De vocecita de niña y de piernas de doncella,

Del rostro de poesía y de manos aterciopeladas,

De corazón puro y de alma con experiencia.

Te mereces todo un cielo lleno de estrellas

Y un infinito mar que perpetúe su reflejo,

Si me dieses tus alas, te traería una de ellas

Y pasaría mi vida atrapándote el resto.

Tienes ese encanto desde que has nacido?

O lo has adquirido con el transcurrir de los años?

Pues si los días pasan y realzan tu brillo,

La belleza tendrá que aumentar sus parámetros.

El retardo de mi origen en una década,

Me hizo prescindir de tus besos y caricias,

De los sueños que arranca tu risa color perla

Y que de tu aire dependa mi existencia y vida.

Tu pasado es tuyo y solamente tuyo,

Tu recuerdo y tu presente son de otro,

Que niegas e intentas despojarlo de tu mundo

Pero el viento escribe su nombre en el polvo.

Esta carta no es un intento de conquista,

Es la descripción de una persona grandiosa,

Que lleva en su anillo la ?M? de ?maravilla?

Y en su corazón a una niña preciosa.

Landa.