Como un ladrón

En medio del silencio de la noche

Acostada en mi lecho por un momento

Sentí tu cuerpo junto al mió

Entregándole el calor de tu amor

Para que despertara y floreciera

La pasión y te llevara al éxtasis del derroche

Y que tu corazón se llenara de placer.

Como un ladrón me oculte en las tinieblas

De la noche para robarle a la existencia

Unos minutos de gloria y felicidad esos

Que me debía, y que a mi alma marchita

Estremeció, regresándole a la vida

Sin importar la reprobación que causaría

Tal decisión ..

Mi alma solitaria se ha cubierto

Con el calor de tu cuerpo para seguir viviendo

En esa fantasía que la hizo estremecer de placer

Y sentirse mas viva que nunca no quiere perder

Esa ilusión que le dio subsistencia cuando ya no esperaba

Nada de la vida pues se encontraba ya

Muerta ..

ANAHILDA