Escucha para ser escuchado

No ignores, no seas malvado

Escucha los problemas de tu hijo

Y ayúdalo como su buen amigo

Y así podrás ser tu escuchado

Ahí estará el siempre a tu lado

Siempre dale la mano a tu hijo

Dale un abrazo cuando él tenga frio

Escucha sus problemas que él te cuenta

Pero también ayúdalo y así su alma se levanta

Porque tú también pedirás que te escuchen

Y así no harás que tu hijo a ti te ignore

Escucha a tu hijo, amigo y a tu compañera

Trátala como vaso frágil, porque es tu ayuda idónea

No te hagas un hombre sencillo por machista

Se un padre verdadero, comprensivo y realista

Te digo que estés con tu hijo a toda hora

Y así harás que el cariño nunca se borra

Si tu no escuchas cuál es tu esperanza

Si al ignorarlo matas sus buenas ganancias

No valla ser que en el fututo tu hijo se valla de viaje

Porque tú nunca lo escuchaste y solo tubo coraje

Escucha a tu hijo y háblale lo malo de los vicios

Que el cigarro y la cerveza lo tira a un precipicio

Si logras ser un amigo y padre con el

Y en Dios tienes cada día puesta tu fe

Seguro que tu hijo en la vida no perderá

Vivirá para ganar y todo obstáculo vencerá

Porque tú también tendrás de el necesidad

Y tu hijo estará ahí, así será la realidad

Si tienes a un hijo que sus vicios ha avanzado

Tal vez el esta así por la forma que lo han tratado

Si el todo lo malo del mundo ya ha conocido

Y su corazón ya esta mas que destruido

Si en este mundo está perdido

Y tiene su corazón herido

Su pensamiento dolido

Por ser más que atrevido

Ahora es cuando tú debes de escuchar

Y a tu hijo tú tienes que perdonar

Que el sepa que lo sabes querer y aconsejar

Y si con el tiempo avanza, debes continuar

El orgullo de padre tienes que dejar ir

Y el padre que escucha tiene que salir

Si eres amigo con él, así más fácil podrá reponerse

Y demuéstrale que Jesús lo ama y en el permanece

Que como tú lo perdonaste Jesús lo perdona

Que Jesús es su salvador y no es una mala persona

Y recuerda que Jesús te escucho a ti

Cuando pediste que tu hijo del vicio pudiera salir

Así como Jesús te escucha a ti

Tú también escucha a tus hijos

También a tu esposa

Y a los que necesiten de ti

Recuerda que todos fallamos

Y merecemos una segunda oportunidad

Escucha, porque tú también lo necesitaras.