Hubo una metafora que sabia cantar

y recitaba los mejores versos

en coplas que derretian los jardines proximos

y calentaban los aires nuevos de domingo

Habian animales que nunca conoci,

habian rastros de una cultura pasada

que nunca se manifesto en el fuego

o el los labrillos de las pitonicias

Todo era nuevo menos yo,

cada elemento de aquella sociedad

desprendia un olor de ensueño

que se filtraba por el nuevo cielo

y el sol acabado de llegar

Era un extraño, estaba solo

entre una multitud de bestias

que se detruian en voz y acto

mientras se pudria el mundo

que aun ni siquiera estrenaban

Los cielos inmaculados de un tiempo

parecian grietas en el caparazon del mar,

habia hambre y desolacion de nuevo

y de nuevo no pude evitarlo

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