A Juanito siempre lo recuerdo

¿Como olvidarlo?

Casi nunca hablaba nada

Y cuando lo hacia

Parecía no decir nada

De hecho todos lo encontrábamos

Bastante estúpido,

Hasta en su caminar se notaba

Era como si sus piernas se lo impidiesen.

De a poco fue cambiando mucho

Físicamente,

Pues lo estúpido siempre lo mantuvo.

Juanito se empezó a enfermar

Su piel empezó a gangrenar

Y cada vez empeoraba.

Pobre Juanito,

Todos se burlaban de él.

Un día su piel estaba tan podrida

Que apestaba desde muy lejos,

Pero su actitud no cambiaba,

Nadie le dio mucha importancia

Solo aumentaban las burlas

Pero a él, parecía no importarle.

Cuando su aspecto empeoró

Considerablemente,

Todo paso de burlas

A miedo,

Era tanto el miedo que provocaba,

Que las burlas

Se remplazaron con maltrato,

Así todos ocultaban el miedo

Que Juanito provocaba.

Un día el maltrato fue a tal extremo,

Que empezaron a arrojarle piedras,

Pero a Juanito parecía no sentir dolor,

En una de esas apedreadas,

Una piedra golpeó su cabeza,

Tirándolo de un barranco.

Mientras caía,

Una vieja rama seca le perforó su estomago,

Y se lo rasgó por completo.

Todos asustados por el hecho,

Bajaron rápidamente a verificar su estado,

Juanito yacía en el suelo, ensangrentado,

Todos parecían histéricos con este hecho,

Y todos se lamentaban por haberlo matado,

Pobre Juanito,

Si tan solo lo hubiese socorrido.

Pero de pronto, Juanito se puso de pie,

Sin decir una palabra,

Todos impresionados cayeron sentados,

Del estomago de Juanito colgaban sus intestinos,

Y después cayeron al suelo,

Nadie podía creer que estuviera parado

¿Cómo puede ser posible?

Ese día supe,

Que Juanito no era estúpido,

Ni tampoco estaba enfermo,

Ni gangrenado,

Lo que le pasaba,

Era que Juanito,

Era un ¡ZOMBIE!