La tierra ...y yo... - LikeaPoem.com
La tierra ...y yo...
Charlando, largamente, con amigos,
sacando conclusiones sobre el por qué,
el patio de la casa me llama,
porque ni siquiera es la casa,
he llegado a la conclusión
que demasiado enraizada se me quedó el alma
en un suelo en donde formé lo que es mío.
Antes fueron trigales de rubia cabellera,
en los que inocente, en los primeros amores,
mis ilusiones de joven escondí, atesoré, sellé.
Muchas veces he querido irme de este lugar,
algo me sujeta desde las sandalias hasta el pelo,
y aunque guerra haga por deshacerme,
sólo tengo un tiempo, así como un recreo,
toca la campana y debo regresar a clases
en las aulas de mi casa, en las que no soy buena alumna,
eso lo tengo claro, cada año menos emociones.
Cuando liberada me he sentido
y he echado a andar por la vida que me lleva lejos,
el tiempo me reclama y me recuerda los árboles;
caminitos de mi madre que con lentitud recorría
para descubrir el nacimiento de las flores en Primavera,
a las que tan adherida estoy ,
como nodriza que no puede abandonar a un pequeñuelo.
La energía existe, la siento en la hojas que empiezan a caer,
augurando el próximo Otoño,
enviando mensajes a mi interior... rogando que no me vaya.
¡Ay!
tengo necesidad de partir muy lejos,
así mismo como parte de mi prole lo ha hecho,
pero tierra, corazón y arbustos lo impiden.
Donde vaya, aún siendo el lugar más bonito;
aún sintiéndome feliz por todo lo que deseo descubrir y descubro,
llega un momento ¡ áh ...!
que la desesperación se me apropia, y regreso al mismo lugar,
a mi tierra, a la que en los años mozos preparé con mis manos,
ayudada de las de mi madre para construir el jardín;
para plantar los navideños que iban quedando grandes dentro de casa;
los frutales, que de tanta riqueza... desechaban mieles;
crecieron mis hijas con ellos,
engrosaron su tallo hasta hacerse firmes,
como ellas...
Existe una lucha entre mi tierra, mis árboles, mis afectos,
y las ganas de libertad para hacer una existencia que me llene el alma,
ahora, que todavía tengo inquietudes, fuerzas, necesidades
de conquistar otros mundos porque no quiero quedarme aquí,
las contradicciones pesan, y no se cual es más fuerte...
pero la tierra ¡pero la tierra que antes fue de araucanos!
me tiene abrazada desde el ombligo que en el vientre alimentó a mis niñas;
se siente hija también, y no quiere a su progenitora perder;
tal vez, deba quedarme aquí,
porque mis pies llevan pegadas raíces que impiden ir muy lejos;
escucho la lluvia y se que en otro lugar no la sentiré igual.
La tierra que acaricié cuando nació el primer rosal
creo que de por vida me impedirá marchar;
ella y yo, no nos podremos separar,
sólo me dará un permiso para mis sueños poder soltar,
y lograr, de eso que no conozco, un poquito de felicidad.
Margarita
15/03/08
La voz que se escucha al principio es de Benjamín Vicuña, un joven actor chileno, protagonista de la película chilena que se titula "FUGA", cuya música es de la misma película.
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