Escribí hoy,
unos versos a Mary;
para igualar su belleza,
me inspiré en las cálidas rosas;
pero que cosas,
de comparar a Mary con las rosas;
si reposada ella se posa,
entre las flores de mi jardín.
Que hermosa eres Mary,
cualquiera que te vea;
arco iris pensare que fueras,
si de colores y finas escamas;
cubiertas se encuentran tus alas.
¡oh! Mary
vuela para mi,
y cuando surques los cielos;
recuerda,
que siempre habrá un lugar para ti;
entre las flores de mi jardín.