Tengo la maldita nausea de ser...

Tengo las mismas nauseas que traspasaron

Las paredes del sueño nocturno,

al lado de una mujer nocturna? al lado de

libros nocturnos.

De sutiles labios excitados por el frío,

salen palabras que hablan con la muerte, que

hablan con años de eternidad sobre lo

eterno...

Soy finita? pero no tanto.

Me quedaré entre páginas no leídas,

Viviendo poéticamente.

Me quedaré en la vida de las cosas.

Que se entienda bien,

En la profundidad de las cosas.

Me quedaré entre objetos antiguos, entre

ramas de árboles, entre mendigos

alcoholizados, entre las ideas, en lo que

consumen las palabras... me refugio en lo que

digo... la nausea se irá...

Me refugio en lo que escribo...

la nausea se irá...

Me refugio en lo que amo... la nausea se irá.

Tengo la maldita nausea de ser...

Mujer, animal, racional, humana... palabras,

palabras...

En el fondo todo viene a ser lo mismo.

Existen espacios repletos de miradas y

sensaciones.

Existen espacios sepias dentro de mi...

Estamos en otoño y caigo desmayada... es la

nausea de ser... Es la nausea de ser...

llueve y quisiera arrancarme los ojos,

Las manos, arañar mi vientre, cambiar de

árbol, de pueblo, de estado, de nombre,

De personas, de imágenes, de libros, de ropa,

de padres, de hermanos, de amantes, de zapatos

e ideas...

He tratado de ganarle a la nausea,

¡pero llega tan de repente! me toma por la

espalda y crece a través de la médula,

se aloja en mi cerebro, en mis piernas,

en mis letras, en mis vísceras.

Tengo la maldita nausea de ser...