Reflexion
Cómo a la tierra hay que arar y sembrar
al amor hay que alimentar, así debe ser
cultivarlo para que comience a florecer.
Sin dejar que el opaco invierno
se apodere de él, arrastrando por el lodo
lo que hemos cultivado.
¡Abrid las ventanas de este triste corazón!...
para que penetre el sol del amor
así construyamos para los dos, un mundo mejor.
Estuvo en el umbral, el mal
quiso entrar, pero se cerró la puerta
ya no existe más.
No nos dejemos avasallar, la paz hemos de encontrar
con la frente en alto y el corazón abierto
ante ese recuerdo siento espanto, lo que sí es cierto.
Sólo amor por ti es lo que llevo dentro
déjame vivir, déjame gozar éste nuevo encuentro
si tu corazón quiso perdonar, que esté tranquilo
nunca en la vida le he de fallar.
WIYOL
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