Tal vez cuando escriba esta carta tenga el alma destrozada, tal vez tenga mi pecho apretado, mis ojos aguados y mi vos quebrantada.

Solo por ti Silvia por ser la persona que me llevo al cielo y después al infierno al mismo tiempo.

Por ti Silvia por ser la persona que sacara el aire con un golpe de seda suave.

Por ti Silvia por hacerme llorar, hacerme reír, pero al fin hacerme sentir.

Por ti Silvia por ser mi mujer y mi verdugo a la vez.

Por ti Silvia por que sabrás lo que siento, por que sabes quien soy, adonde voy y por que voy. Pero lo que nunca sabrás es de cuanto te estoy amando hoy.

Por ti Silvia por que de verdad aprendí a ser feliz y a sufrir pero sobretodo aprendí lo que es vivir. Sabes algo Silvia no pasare un día, un instante ni un momento, que pase desde hoy que no te maldiga. Y no por que te odie, ni por que no hubiese querido conocerte, si no que lo haré por que te sueño, te quiero, te extraño y sobretodo por que aun te Amo.

Oscar A. Barreto