Te confieso que...
Hay
Pensamientos desnudos
Cobijándose en mi mente.
Sobre el claro de mis ojos
se refleja cual espejo,
el cristal de mi alma
y con sublime pureza
te muestra sus razones para amar.
Siento en mis adentros
los salvajes latidos de mi fiel corazón
en busca de tu manso amor.
Las cumbres borrascosas del silencio,
Forman alud de esperanzas,
que bajan por las barrancas de mis ansias hasta tus llanos sentimientos.
Traen montañas de te quiero.
Esos te quiero que "alguien" del pasado
despreciara por alcanzar
la cima de un amor furtivo
disfrazado de amistad.
Un amor añejo, que se posó
sobre mi límpido cielo
cual negra nube de verano;
posesionándose de lo que no le pertenecía.
Llegas tú, cual río caudaloso
Trayendo tus claras aguas
a mis diáfanos y sedientos deseos.
Mis esencias,
advierten el fuego que se agita
en la ternura de tu péndulo amor.
Déjame brotar con ímpetu
y ser dulce vertiente
de tus magnas inspiraciones.
La luna que te besa,
La estrella que te cubre
en el más manso de los silencio
y cruzar este universos para abrigarme
en tus brazos y florecer en tus manos
cual rosa pasión bajo tu tibio rayo de luz.
("Llegas cual suave brisa
después de la tempestad.
Tú, mi rayo infinito de luz...")
(J.Azul)
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