A TÍ...

Mis días sin tu presencia

son noches que agonizan,

por eso durante tu ausencia

mi tristeza es reconocida

Una madrugada sin tu compañía

es para mí una eternidad,

siento que tu voz, tus tiernas palabras

me saca de la soledad.

Has llegado a ser parte de mi

Con esa misteriosa distancia

frente a mis ojos

cada madrugada anuncias tu presencia,

y con devota reverencia te saludan

mis objetos y mis despojos.

Siento tu halago cada día

y mi reloj de arena me acompaña

mientras espero ansiosa tu llamada

Una oportunidad para escapar y enredarme

en tu constelación de lunas y estrellas

La inspiradora realidad me ha encontrado

en lo nocturno de tu mirada,

siendo mi alimento y guía terrenal

para indicarme que hasta ahora

sólo ha sido el comienzo de un largo viaje

Si he de partir, ha de ser ahora,

con mi regazo en tu corazón silencioso;

es quizás la envidia humana quien podría comprender

la rendición al más poderoso anhelo

que sólo tú has podido otorgarme

La velocidad penetra y sacia mi cuerpo,

dejando atrás mis más fieles demonios

No existe temor, sólo tú estás aquí,

sólo tú me acompañas y calmas mi llanto

con ese misterioso azul de tu cielo

y tu pecho hacia lo más profundo de esta noche.